“Cada límite es tanto un comienzo como un final, porque el fragmento de una vida, por muy típico que sea, no es la muestra de una red uniforme: las promesas pueden no cumplirse y un comienzo ardiente puede ir seguido de una declinación”.
La energía diligente de George Eliot (pseudónimo de Marian Evans (Nuneaton, Warwickshire, 1819-Chelsea, Londres, 1880)) logra evocar una inteligencia comprometida, “una santa Teresa, fundadora de la nada, cuyos amorosos latidos y sollozos tras una bondad no alcanzada tiemblan y se dispersan entre obstáculos, en lugar de centrarse en una hazaña reconocible”. En su centésimo quincuagésimo aniversario, lo que nos enseña Middlemarch (1871–1872) recién reeditada por Cátedra, en edición de Pilar Hidalgo y traducción de Mª Engracia Pujals, es a experimentar con la audacia, a abrazar la discontinuidad de algo que, solo a primera vista, parece una novela tradicional.
Mi ensayo homenaje a la novelista británica se incluye en la más reciente entrega de Quimera-Revista de literatura, una revista española de análisis literario. Fue fundada en noviembre de 1980 y tiene una periodicidad mensual.
Ya en línea y en quioscos el número de enero de 2022 #Quimera457, dedicado, entre otros contenidos, a la mirada del escritor y crítico Rafael Chirbes. Lean aquí el sumario completo:


